La artista de Polonia Ewa Juszkiewicz transforma las pinturas clásicas en su propia interpretación y visión surrealista. El estilo clásico de la pintura representa a las mujeres a la manera de la época, excepto por un giro peculiar. Estos retratos están enmascarados por la ropa, las plantas y, aún más, el cabello.
«En algún punto me cansé de repetir rostros humanos, empecé a buscar formas, fenómenos existentes en la naturaleza, que pudieran sustituir las caras. Comencé a transformar lo que se entiende tradicionalmente como ‘retrato’, y a experimentar con los efectos que tenía sustituir un rostro por una máscara tribal, mezclar los rasgos faciales con sus alrededores, o borrar una cara completamente”. –Ewa Juszkiewicz
Al centrarse en los retratos femeninos familiares de la época del Renacimiento y el siglo XIX, Ewa Juszkiewicz puede desfamiliarizar a los sujetos y crear una imagen nueva e inesperada. Juszkiewicz no está cambiando la estética de las pinturas que siguen siendo las mismas que las de la época, sino que utiliza su trabajo para explorar la función del retrato y el papel que desempeñan estas mujeres y sus rostros en su contexto.
